El juego es exploraciÓN, demostraciÓN, organizaciÓN, planificaciÓN, regulaciÓN, control (autocontrol y descontrol), imaginaciÓN…y sin duda, diversiÓN y emociÓN. Millones de estudios demuestran que jugar estimula el cerebro de los niños y les favorece el aprendizaje y el desarrollo en muchos ámbitos de su vida. Debemos cuidar el juego de los niños, brindándoles espacios seguros, tiempo de calidad y herramientas para disfrutar de éste. Desde el colegio, tenemos una oportunidad brillante para estimular el juego.
El patio del recreo es un lugar donde el niño tiene la oportunidad de ser él mismo, desconectar de las clases (pero seguir aprendiendo) y liberar energía. Sin olvidar la importancia del juego libre, necesario también en el desarrollo de los niños, queremos ofrecerles opciones, alternativas y estrategias para que, jugando juntos, todos puedan tener la oportunidad de disfrutar como niños. Desde el respeto a su tiempo, dándoles libertad para usar ésta misma, la libertad de ser niños.
El juego es divertido y sale de forma innata pero a la vez es difícil y complejo, intervienen condiciones personales, personalidades, emociones…que, a veces es necesario canalizar y redirigir para que el juego sea eso, diversión. Diseñar un plan de patios para los niños con necesidades educativas especiales les ayuda a ellos, y también a los demás, generando un clima de respeto, empatía, confianza e INCLUSIÓN.
Nuestro plan entonces está destinado a todos los niños, de todos los cursos, y es un camino que lleva una parte de aprendizaje y una parte de desarrollo. Hay etapas de guiar, etapas de soltar, etapas de modelar y etapas de volar. Con los juegos propuestos se pretende que el niño se sienta seguro conociendo las reglas, normas y estrategias de un juego, que las ponga en práctica, con aciertos y errores, que vea ejemplos de juego e interacciones sociales adecuadas y que junte todo, para ofrecer y recibir un juego sano y gratificante para él mismo y para los demás. Así, cuando juegue sin el adulto, tendrá recursos para ello.
Se incentivan también en el plan, las relaciones sociales con los compañeros de la misma clase pero también, la oportunidad de jugar con otros niños, de otras edades, de otras clases…y, como en cualquier aprendizaje, si ven en el adulto los valores que se transmiten, éste será más significativo, por lo que los profesores no solo guiamos, ¡también jugamos! Juego en modo ON es activarnos, despertar, volcarnos en lo que hacemos y darlo todo de nosotros mismos y los niños lo hacen así en el JUEGO, así que ¡A jugar!