Los bebés han podido disfrutar de una experiencia única a todo color como es la actividad de pintura comestible
Pintar es una actividad relajante que promueve la creatividad y que puede ser adaptada a todas las edades. Los beneficios son múltiples y esta actividad es una explosión para los sentidos.
Los sentidos nos permiten tener un mejor entendimiento y acercamiento al mundo que nos rodea. Desde su nacimiento e incluso antes, los bebés perciben el mundo a través de los sentidos.
Diferentes teorías afirman que antes de nacer el niño es capaz de oír en el vientre materno. La vista es el sentido menos desarrollado al nacer.
El tacto es el sentido más importante para los bebés. La sensible piel del bebé no solo recibe los estímulos como el frio o el calor, sino que va a empezar a explorar con sus manos y pies todo lo que se ponga a su alcance.
La boca es muy sensible y a través de ella exploran el medio que los rodea.
Con esta experiencia las educadoras nos habíamos planteado una serie de objetivos:
- Trabajar la motricidad fina
- Favorecer la coordinación óculo-manual
- Experimentar diferentes texturas
- Cambiar la posición del cuerpo
- Descubrir diferentes sensaciones a través del cuerpo
Los materiales que hemos utilizado han sido papilla y colorante alimenticio y …. adelante!
Les ha gustado mucho, unos pintan sobre el papel, otros en su cuerpo…las posibilidades son infinitas.
