Los niños sienten una gran curiosidad e interés por observar el entorno y lo que les rodea. Les llama mucho la atención los cambios que se producen en las distintas estaciones, ganando una gran vivencia significativa para su desarrollo; por eso es importante que el niño experimente con su entorno y por eso, ahora en otoño, hemos reunido aquellos elementos que pueden encontrar en esta estación para poder manipularlos en el aula.
Hemos reunido nueces, castañas, frutos secos, etc… y los niños los han probado y manipulado en el aula.
También hemos conseguido reunir muchas hojas de otoño y las hemos distribuido en el aula, para que pudieran experimentar y disfrutar con ellas. Así hemos creado nuestro propio rincón del otoño.
Con todo esto queremos que los niños observen y entren en contacto con el otoño, entendiéndolo como parte del medio físico que les rodea.